Al caer la tarde
te sientas frente al
espejo
y lentamente te vistes
de amante,
estás enamorada,
te pintas la mejor
sonrisa en tu boca,
te retocas el pelo
que más tarde yo
caminaré con mis manos
y cubres tu matrimonio
con el olvido
para ser feliz entre
mis brazos.
Te das la vuelta
y dejas atrás tu vida
para encontrarte
conmigo,
vida mía.
Me tomas de la mano
casi en secreto
y luego con decisión
caminamos juntos a
través de la multitud
como si no existiera
nadie
y todo gira alrededor
nuestro.
Entonces sólo los dos
importamos,
nos desnudamos y por
una noche
somos eternos.
Más tarde, frente a él
te vestirás de mujer
perfecta.